Los perros se contagian de nuestras emociones
Si eres una persona, ansiosa, pesimista o agresiva, transmitirás esto a tu perro y se contagiará. Y en menor medida, puede suceder a la inversa, si tu peludo es relajado, logrará transmitirte esa calma.
Es normal, que cuando empiezas a llorar, te das cuenta de que tu peludo viene a tu lado, por ejemplo, cuando estoy alterada, mi perro apoya el mentón en mi rodilla y me mira a los ojos como diciendo “¡Estoy aquí para ayudarte!
Parece que pueda leerme, capta mis estados anímicos y quiere consolarme cuando sufro un bajón. ¿Pero, cómo saben ellos cuando estamos mal?
Los perros son sensibles a nuestro comportamiento, al lenguaje corporal y a las emociones. ¿Sienten lo que sentimos? Sinceramente, aunque los investigadores no se ponen de acuerdo, yo, por mi experiencia con ellos, estoy convencida de que los perros poseen empatía. La empatía es la experiencia de entender la situación de otra persona, e incluso sus emociones.
Según un artículo de Psychology Today, los perros adultos tienen un cerebro similar al de un niño pequeño, con habilidades mentales, vocabulario e inteligencia emocional similares. Los niños pequeños no son capaces de mostrar empatía, por lo que es posible que los perros tampoco. Tanto si pueden empatizar con nosotros como si no, no hay duda de que los perros reaccionan a nuestros estados anímicos.